Brilla y brilla el farol encendido como un bichito de luz,
Siempre alumbrándome en este camino, que a veces es una cruz.
Desafiando a las tormentas tu vocecita ahí está.
Canta sirena que me despierta tu beso en la oscuridad.

Angelito, tirá más fuerte, que ya no quiero esperar.
Sigo adelante, cueste o no cueste, no queda nada detrás.
Angelito de la guarda, no me dejes caer,
Tengo que llegar al norte antes del atardecer.

Hoy quisiera tener unos brazos tan grandes como tu amor,
Para tejer un nidito de abrazos, para espantar el dolor.
Pintáme, hijita, un sol bien amarillo, que quiero llevármelo a andar.
Pa' que ilumine a la gente sin brillo tu pincelito de amar.

Angelito, dame la mano, vayámonos a volar.
Nada es tan bueno, nada es tan malo, nada nos va a separar.
Angelito de la guarda, no me dejes caer,
Tengo que llegar al norte antes del atardecer.

Cuando este mundo mezquino se empeña en esconderme el calor,
Me hundo en el mar de tu mano pequeña que es mi rayito de sol.
Duerma mi niña, sueñe bonito, yo le canto su canción,
Así mañana con sus ojitos alumbra mi corazón.

Angelito abrí tus alitas, que tenemos que seguir.
Vamos haciendo nuestra coplita por el camino sin fin.
Angelito de la guarda, no me dejes caer,
Tengo que llegar al norte antes del atardecer.

(Letra y música: Javier Sánchez)